19 de junio de 2010

La mancha negra del petróleo británico


El derrame que desató la polémica.

Por Alfredo Grieco y Bavio

Mientras lo presionan a Obama para que sea más duro con British Petroleum, en Londres al recién electo Cameron lo aprietan para que defienda a la empresa. En tanto, el derrame sigue descontrolado.

Mientras los ingleses se jactan de la tecnología que les ha permitido detectar hidrocarburos en el área de las Islas Malvinas, la mayor empresa petrolera de Gran Bretaña protagonizó el mayor desastre ecológico de la historia de Estados Unidos. A ocho semanas del comienzo de la marea negra en el Golfo de México se acumulan los frentes críticos que someten a British Petroleum a una intensa presión que amenaza con arrastrar al conjunto del sector a una catástrofe hasta ahora desconocida. El gobierno conservador recién electo del premier David Cameron puede caer en Londres por efecto de las presiones contrarias de las empresas nacionales que le piden que las defienda contra los ataques externos e internos, y la oposición laborista que no ve en la cuestión un asunto de tanto patriotismo. El presidente norteamericano Barack Obama no vaciló antes de comparar la acción británica con la de los atacantes del 11 de septiembre del 2001 que derribaron las Torres Gemelas en Nueva York.

La agencia estadounidense Fitch rebajó el martes la categoría de British Petroleum en seis niveles, de “AA” a “BBB”: al borde del abismo en lo que respecta a recomendación de inversiones. La nueva categoría en la que BP ha sido ubicada implicará mayores costos para la empresa a la hora de solicitar préstamos o créditos. Para la firma, la marea negra desatada por el accidente de la plataforma “Deepwater Horizon” que operaba en el Golfo de México en abril adquirió dimensiones dramáticas. Políticos estadounidenses han exigido que la compañía coloque 20 mil millones de dólares en un fondo fiduciario a utilizarse para trabajo de limpieza en las costas de Estados Unidos.

Los especialistas consideran que el vertido de crudo en el golfo es muy superior a lo calculado por BP. Según el Instituto de Geología estadounidense, de la fuga fluyen a diario hasta 5.400 toneladas de petróleo. Según Fitch, a los costos de limpieza y de indemnización, de 6 mil millones de dólares, probablemente se sumarán multas de hasta 8 mil millones de dólares. El reclamo de compensaciones podría durar décadas, como sucedió tras el accidente del buque Exxon Valdez ante las costas de Alaska en 1989.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, recorrió las playas turísticas de Pensacola, en el estado de Florida, horas antes de pronunciar un discurso dirigido a la nación sobre el petróleo que fluye al Golfo de México a raíz del accidente. Obama destacó que su administración continuará presionando a BP para que compense a las empresas locales por las pérdidas que están sufriendo y para que efectúe las labores de limpieza correspondientes en las costas de los cuatro estados afectados. El presidente demócrata se encuentra bajo una fuerte presión para actuar en contra de la gran petrolera británica. Su discurso fue el primero de su presidencia pronunciado desde el Salón Oval de la Casa Blanca, reservado a situaciones de guerra y catástrofe. El portavoz de Obama, Robert Gibbs, señaló que los daños podrían ascender a “decenas, sino centenares de miles de millones de dólares”. Todo lo que aportará BP al fondo fiduciario no sería más que un “anticipo” a cuenta de un monto que no conoce límite superior por el momento, agregó.

Por lo visto, BP tenía conocimiento mucho antes de la catástrofe de los problemas en la plataforma petrolífera “Deepwater Horizon”. Más de una semana antes de que se produjera la explosión en la plataforma, un trabajador hablaba en un e-mail de un “yacimiento petrolero de pesadilla”. Las autoridades cubanas están preparándose con la ayuda de expertos de Venezuela para la posible llegada a sus costas de la “marea negra” que continúa expandiéndose en el Golfo de México. El jefe de la Defensa Civil de Cuba, el general Ramón Pardo, dijo el martes a periodistas en La Habana que actualmente trabajan en la isla expertos de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) enviados por el presidente Hugo Chávez ante la amenaza del derrame.

La marea negra en el Golfo de México repercutirá en todo el sector petrolero, según un análisis de la agencia Moody’s. El yacimiento dañado de BP ha desembocado “en una crisis sin precedentes” a nivel “económico, legal, ecológico y de autoridades” para empresas que trabajan en el mar, indicó el director gerente de Moody’s, Steven Wood. Los líderes en el mercado como Exxon, Shell, Chevron y ConocoPhillips acusan a BP de no haber actuado bien ante la catástrofe, que era “evitable”.

A falta de reacciones más actuales, el premier británico Cameron admitió el martes la responsabilidad de su gobierno en una masacre ocurrida hace 38 años en Irlanda del Norte. Fue el Bloody Sunday, el domingo sangriento de 1972, cuando 13 personas murieron cuando la policía disparó contra una manifestación republicana pacífica y desarmada. John Lennon y U2 pueden estar más tranquilos, a diferencia de los empresarios británicos y los afectados por la marea negra.

Publicado el 17 de Junio del 2010, en El Argentino.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario